31 ago 2009

Reseña de álbum: Invisible Touch (1986) de Genesis.



- Mike Rutheford; guitarras y bajo.
- Tony Banks; teclados.
- Phil Collins; batería, percusión y voz.

Track List:

1. Invisible Touch (3:26).
2. Tonight, Tonight, Tonight (8:50).
3. Land Of Confusion (4:44).
4. In Too Deep (4:57).
5. Anything She Does (5:13).
6. Domino; Pt. 1 In The Glow Of The Night, Pt. 2 The Last Domino (10:41).
7. Throwing It All Away (3:48).
8. The Brazilian (4:49).


Tras la salida de Peter Gabriel de la banda y la arremetedora imagen de Phil Collins como nuevo líder del grupo, Genesis fue acercándose paulatinamente a un sonido Pop estilizado y sin pérdida total de la corriente progresiva originaria. Motivados por el movimiento de los ochenta, plasmado de agrupaciones que buscaban consolidarse en corrientes dispersas y muy ajenas unas con otras, Genesis logró concentrar en su música un talante unidireccional en pos de adecuarse a los estatutos presentes en la industria de ese entonces.

La nueva veta de Genesis haría que generaciones más precoces se acercaran a la banda; los seguidores fundacionales, en cambio, se fragmentarían en los que respetaban y degustaban del innovador sonido y los que no sentían que lo realizado por el grupo se adecuaba a su origen. En una u otra posición, Invisible Touch sería un ejemplo de qué tan bien se había asimilado la música de Genesis en el medio y cómo Collins manejaría la escena de una manera más moderna y competente con la década.

Invisible Touch, decimotercer disco de estudio de la banda, sería la cúspide de la actualización de su género. El éxito, único en toda su historia musical, sería avasallador. En efecto, de todos sus álbumes es el que logró más singles (cinco), ubicándose entre los tres mejores de la lista Billboard de 1986.

Con un track list de 8 composiciones, Invisible Touch se divide entre los temas más largos, propios de la esencia anterior al álbum, y temas concisos y ajustados a un marco propiamente comercial. Así, el sonido resultante sería una suerte de congenio que interpelaría a la aceptación general. Logrado casi a cabalidad, la acogida posicionaría al álbum como uno de los más mixtos y recordados de la banda. Generador de emociones múltiples, Invisible Touch catapultaría a Genesis a la masividad, no sólo en términos de ventas sino también en moldear un potente estilo comprometido con el gusto colectivo.

La partida del álbum está a cargo del tema que da nombre al disco; con baterías con aire positivo, un bajo marcado y arreglos en sintetizador, Invisible Touch lleva consigo la tónica existente en todas las canciones que le preceden. Abraza un sonido que abre camino a una nueva faceta de Genesis, un tanto menos seria y carente de una lírica en sumo conceptual. Luego, para tranquilizar un poco los decibeles y la rítmica eufórica de Invisible Touch, suena como segundo track Tonight, Tonight, Tonight, un tema de más de 8 minutos que posee lapsos puramente instrumentales mezclando batería eléctrica y teclados sostenidos. Con arremetidas aleatorias de la voz de Collins, Tonight, Tonight, Tonight es quizá lo que más se asemeja a la corriente histórica del grupo, pero con guitarras haciendo sólo lo necesario y sin presentar un virtuosismo de gran magnitud.


Land Of Confusion, tercer corte, es un tema que se desliga de los demás por la esfera política y crítica que posee. Las letras, a cargo de Mike Rutherford – guitarrista de la banda – versan sobre los extraños y paradójicamente indecisos años de la Guerra Fría, donde actores sociales como Reagan son analizados irónica y vehementemente. La cinta de la canción lograría un Grammy como mejor video musical y competería en MTV como mejor video del año, cayendo frente a Sledgehammer de Peter Gabriel. Lo interesante del suceso es la inclusión de Genesis a la escena social, sin desmerecer el poder interpretativo del tema, pues no se había denotado antes un interés tan gráfico por evidenciar el descontento presente alrededor del globo por el manejo fútil de los problemas que aquejaban a los países presentes en el conflicto. La aparición de personajes relevantes culturalmente y retratados de manera burlesca como marionetas es simplemente notable.




Genesis - Land Of Confusion (official clip).

Luego aparecen como tracks 4 y 5 In Too Deep y Anything She Does respectivamente, mostrando la irrefutable condición Pop del grupo. La diferencia entre uno y otro tema radicaría principalmente en el carisma romántico de In Too Deep y la atmósfera de empatía de Anything She Does. Como arreglos musicales no destacan en demasía, pero sí representan muy bien lo ya mencionado, en el sentido de la nueva cara artística de Genesis y su desinterés por mantenerse estáticos frente a la magna carrera de grupo Progresivo.

Domino, con dos partes sucesivas, Pt. 1 In The Glow Of The Night y Pt. 2 The Last Domino, se revela frente a la línea representativa del disco y emerge como una composición con matices absolutamente anteriores a Invisible Touch. La fuerza vocal de Phil Collins se mezcla sabiamente con el aura envolvente del teclado sintetizado, mientras que las baterías van forjando la pauta para los cambios melódicos, sobre todo en la Pt. 2 del tema. Mucha rítmica intercalada y superposiciones ambientales potencian un fulgor propio de una canción que da concepción a la raíz histórica de Genesis, haciendo rememorar en algún sentido a The Lamb Lies Down On Brodway de 1974.






Genesis - Domino Pt.1 y 2 (live at the Wembley Stadium 1987).

Finalizando el disco encontramos Throwing It All Away y The Brazilian, dos canciones muy distintas entre sí al ser la segunda puramente instrumental. Throwing It All Away comienza y termina con una guitarra amable y apaciguadora que nos comunica, junto con la letra, un mensaje de libertad frente a lo que nos abruma, exponiendo una suerte de bello tedio que llama a dejar todo de lado y preocuparse por lo que realmente importa, con coros significativos que dejan en transparencia este mensaje. The Brazilian, por otro lado, amplía el concepto de fusión en Genesis y deja una brecha abierta para lo que vendría posteriormente en la carrera de la banda. Con un acorde memorable y una percusión más que importante, The Brazilian evidencia aún más que Genesis, una de las agrupaciones más influyentes de todos los tiempos, contiene en sí un aspecto único y una calidad interpretativa inexorable.






27 jul 2009

Factor 27, el número negro de la historia del Rock

Morir joven no es un hecho insólito cuando se trata de personajes nativos de la escena del Rock. La fama y la ostentosa libertad de ejercer un camino asistémico lleva a muchos a gozar de los excesos y no controlar las consecuencias de ese goce. A su vez, la personalidad particular de muchos de los músicos que han sido parte de la biografía del arte del sonido no acomete a rasgos simples o comunes, lo que confiere una inestabilidad propia de una sensibilidad inmanente.

Así, nos vemos resueltos a aceptar a los tempranos occisos y ver cómo su carrera se corta de súbito por el último respiro. Resignados a tolerar el fin de influencias y talentos únicos, el seguidor debe estar consciente de la fragilidad explícita de los artistas y de su poco aguerrido control sobre sus proyecciones de vida. Luego, resulta escabrosamente curioso el encontrar una agria coincidencia en las muertes de seis grandes exponentes del Rock de todas las épocas, ligadas todas ellas a una especie de código numérico etáreo reiterativo: los fatídicos 27 años.

Robert Jhonson, 8 de Mayo 1911 – 16 de Agosto de 1938.

La historia colectiva cuenta que Robert Jhonson, llamado el “Rey del Delta Blues”, vendió su alma al diablo en un crossroad en Misisipi para tocar el Blues mejor que cualquier otro. Míticamente aceptable, esta sentencia lo convirtió en uno de los representantes de la música Blues más importantes del siglo pasado, elevándolo al sitial de las leyendas artísticas de nuestra época. Se dice que fue envenenado con whisky, que murió de neumonía e incluso de sífilis. Sea lo que fuere, Robert Jhonson dejó de tocar en Greenwood a la edad de 27 años.

Brian Jones, 28 de Febrero de 1942 – 2 de Julio de 1969.

La muerte de Brian Jones, miembro fundador e instrumentista múltiple de los R
olling Stones desde 1962 a 1969, posee detalles y acontecimientos que han hecho dudar desde siempre la hipótesis de un accidente. Fue encontrado carente de signos vitales en su pileta de Cotchford Farm, en Julio del 69, mismo año en que había sido retirado de la banda por insostenibles relaciones con los demás integrantes. Lo que se maneja a priori es que el exceso de alcohol y de tranquilizantes habría sentenciado su deceso, mas un análisis acabado de los hechos dicta algo notoriamente distinto. En una jornada nocturna con albañiles que se encontraban trabajando para Jones, se precisó un momento en el cual éste se encontró a solas con Frank Thorogood, cabeza de los obreros, el cual había sido duramente criticado por el artista por trabajos mal acabados. Fue la última persona que lo vio con vida. Luego, a tempranas horas del 3 de Julio, el jardinero de Brian observó cómo de manera ampliamente sospechosa Tom Keylock - chofer de los Rolling Stones – y Thorogood quemaban las pertenencias de Jones, incluida sus ropas.

En 1993 se supo de la mano de Keylock que Thorogood, antes de morir, le había confesado la autoría en el presunto asesinato de Brian Jones. A esto se le suman las declaraciones de Anna Wohlin, la novia del artista en aquellos años, quien mantuvo la postura de que Thorogood la manejó en todo momento con respecto a qué decirle a la policía, y que Tom Keylock le habría ofrecido dinero para callar. El silencio de los Stones es también una pieza faltante en la investigación, y el por qué del hermetismo de su funeral y de su ataúd, hecho de metal al vacío. Fuera de todas incertidumbres, lo que aquí compete es dar con la única certeza en la muerte de Jones: el haber fallecido a los 27 años.

Jimi Hendrix, 27 de Noviembre de 1942 – 18 de Septiembre de 1970.


La piadosa guitarra de Hendrix acalló tonalidades en 1970, en circunstancias que, al igual
que Brian Jones, no han sido resueltas a cabalidad. Luego de una larga fiesta, Hendrix fue dejado en su apartamento de un hotel de Londres por su novia. Tras mezclar pastillas parar dormir con alcohol, al poco tiempo se vio ahogado por su propio vómito. Monika Dannemann, su pareja, acusó que la negligencia médica fue la causante de su muerte, y no que éste ya se encontraba sin pulso al llegar los asistentes de la ambulancia. El testimonio final fue que el exceso en la bebida lo condujo a un reflujo incontrolado que, bajo la influencia de las pastillas, le bloqueó el aire.

Existe, empero, una nueva teoría emanada de uno de los asistentes de Hendrix, el cual acusa a Michael Jeffery, representante del guitarrista, de haber asesinado al talento de Seattle haciéndole tomar fármacos y vino, pues sabía que sería despedido. En cualquiera de las dos opciones, Jimi Hendrix murió, tal como Jhonson y Jones, a los 27 años.

Janis Joplin, 19 de Enero de 1943 – 4 de Octubre de 1970.

El panorama global aún no asimilaba la partida de Hendrix cuando al mes siguiente la reina del Rock y la psicodelia dejaba grabaciones inconclusas por motivo de su muerte. Beatn
ik en sus inicios, cantante después, Janis siempre fue considerada un símbolo de la feminidad y el poder de ésta. Bebedora por excelencia y defensora del uso de las drogas, luego de una tarde en los estudios de compilación y tras haber salido con amigos a celebrar, fue encontrada en su cuarto pálida y sin vida. La razón: sobredosis de una heroína altamente pura.

Las jeringas desparecieron del lugar y se cree, hasta el día de hoy, que alguien más estuvo al momento de su deceso. Murió a los 27 años.

Jim Morrison, 8 de Diciembre de 1943 – 3 de Julio de 1971.

Morrison reunía en sí patrones de conducta que lo dictaminan como uno de los más genuinos rockstar de la historia. Con una capacidad intelectual sobre el promedio y con un talante creativo intrigante, fue forjando su fama a base de su presencia avasalladora en el escenario y su intransigente forma de mirar la vida. Abrazado a excesos incalculables, a la práctica de un sexo inagotable y a experimentaciones propias de sus llamados más internos, Jim Morrison nunca se percató del final que tendría su eterna aventura de existencia.

Consumidor de variables drogas (exceptuando la heroína por su fobia a las agujas), permaneció impávido y no supo detenerse ante la atracción que ejercía tanta alevosía conceptualizada en sus acciones perturbadoras del sentido común. Las razones de su muerte, al igual que los casos anteriores, son para algunos un enigma no resuelto. La principal causa que se maneja es la de un paro cardíaco ocurrido en una bañera del barrio Marais en París, pero la opción de haber contraído el Sida también se ha barajado.

Se especula, además, la muerte misma del artista, pero todo siempre enmarcado en los misterios mediáticos de las defunciones de personajes de la talla de Morrison. El hecho innegable se repite: murió a los 27 años.

Kurt Cobain, 20 de Febrero de 1967, 5 de Abril de 1994.

La más reciente pérdida arrimada a la sentencia de los 27 años fue la del vocalista y guitarrista de Nirvana, pérdida que enmudeció a toda una generación y que terminó virtualmente con el movimiento Grunge. Con una fragmentaria situación psíquica producto de un trastorno bipolar avanzado, Cobain nunca escondió su despecho a la vida y sus ganas de, en algún modo, terminar con ella. Desde sus letras hasta su comportamiento en público se evidenciaba una rebeldía que iba más allá de contradecir los estatutos vernáculos y que atacaba, en su raíz primaria, a la existencia misma.

Marzo del 93 sería el principio de una seguidilla de episodios notoriamente sintonizados con las intenciones de Kurt. La policía allanó su casa y confiscó una botella con pastillas y armas
tras un aviso de Courtney Love (esposa de Cobain), negando éste en todo momento un presunto intento de suicidio. Luego se integraría a un centro de desintoxicación de drogas, del cual se fue sin dar aviso para volver a Seattle, su ciudad de origen.

Se mantuvo vagando en silencio por la urbe y se le perdió la pista, hasta que el 8 de Abril su cuerpo fue encontrado extendido en el suelo de su garaje. La autopsia daría con la fecha exacta de su deceso, el cual sería expuesto como motivo de una herida de bala auto-inflingida. Muere, al igual que todos los anteriores artistas, a los 27 años.

8 jul 2009

Cuando las sombras tienen sentido: los videos de Tool.

Para quien no ha comprendido aún el trabajo visual que se esconde detrás de los videos de Tool, así como el compendio de ideas fácticas de sus letras y el interés fundado en generar nuevas corrientes de escapatoria para los pensamientos estáticos, el fenómeno de ver por vez primera una de sus obras oculares puede resultar una interesante mezcla de desconcierto y escalofrío.

Sumergidos en una atmósfera de poca luminosidad y brío argumental, los videos musicales de Tool han generado gran atención en el medio artístico. Partiendo por la palpable realidad de que sus integrantes sólo aparecen en dos de ellos, el resto son una consecución de creaciones con gran imaginativa y exentos de parecido alguno con los clips que se acostumbra ver. Seres fantásticos, en su mayoría realizados con maquetas intransigentes y áureas multifacéticamente oscuras, dan vida a historias que versan en la exploración de los lados ocultos de la mente humana y lo que pueden entregar cuando son develados.

Bajo la inagotable creativa de Adam Jones, guitarrista de la agrupación, los videos que han resultado de su tutela son eventos imperdibles para quien se esmera en penetrar más y más en la música de Tool. Con ayuda de artistas plásticos de la talla de Alex Grey, el resultado ha sido pesadamente notorio en los esquemas perceptivos del hombre común. Con una reiterada técnica stop-motion, donde los personajes y contexto por medio de la captura de fotografías aparentan movilidad generando un efecto intermitentemente continuo, los videos de Tool dan a entender la temática que busca la banda al seguir esta línea tan particular de producción. Como una bofetada a la cotidianeidad del medio, las imágenes que van fluyendo hacen de estas creaciones un perfecto complemento para todo aquel que desee explorar más allá de los acordes y el Metal fino de la banda.

He aquí tres videos significativos de Tool, todos abiertos a lecturas subjetivas y con una pequeña reseña de la historia que lleva cada uno.

SOBER, 1993. Dirección: Fred Stuhrt, Diseño de modelos: Adam Jones




Una especie de hombrecillo sin textura facial definida se mueve a través de cuartos y pasillos solitarios que pretenden generar un escenario frío y perdido. En su poder, una extraña caja sin fondo que abre con gran mesura pero en donde jamás se logra ver su contenido. Lo vemos levitar sentado en una silla para luego caer, destrozándose la cabeza. A la par, seres poliformes pululan cerca mientras de las paredes pareciera emerger carne.

PRISON SEX, 1995. Dirección: Adam Jones.



Prison Sex fue un video que no estuvo falto de polémica, censurado por MTV por su poco digerible contenido. Nos muestra una especia de muñeco desmembrado que explora lo que pareciera ser su lugar de encierro. Oscilan las imágenes de un ser con mayor potestad y partícipe de la construcción del muñeco, con forma híbrida, largos dedos y de color negro. El muñeco examina los bloques que conforman el cuarto donde se encuentra, encontrando conformaciones corpóreas más extrañas aún. En una determinada escena, el ser omnipotente pisa un pequeño hombre – o lo que pareciera ser uno – totalmente desfigurado. Se destaca la aparición de una máquina que posee una suerte de parte frontal con la cara de un bebé. El video concluye con el muñeco sentenciado a quedarse en los dominios del ser oscuro, resignado a su condición.

STINKFIST, 1996. Dirección: Adam Jones.




Stinkfist, mostrado en las cadenas de televisión como “track 1” por su ofensivo nombre, es quizá uno de los videos de Tool con la interpretación más necesaria en torno a las imágenes que se presentan. Como un intento por socavar la noción de que el hombre no extiende más allá sus ansias luego de saciado su interés por algo, ya sea infuso por sus deseos más arcanos o por deseos creados por la sociedad o los medios, Stinkfist nos muestra una serie de humanos que se desprenden de partes de su cuerpo, se quitan el pellejo, consumen clavos y hacen una variedad de actos que buscan la mayor experimentación posible, algunos con dolor y otros con perturbadora tranquilidad. Se evidencia la dependencia creada por la tecnología, en un escenario potenciado con cables y un extraño brazo maquinal.

1 jul 2009

Nacido para influir: los covers de Bob Dylan.


Como una de las figuras más importantes de la música contemporánea, Bob Dylan supo mezclar corrientes artísticas que lo anexaron al salón de la fama histórico del conocimiento colectivo. Es, en la actualidad, un ícono que representa mucho más que una imagen irreverente o conflictiva, sino más bien un eterno compositor que, desde un principio, innovó en el género del Folk y el Country-Blues generando letras de grandioso peso poético y semántico. Catalogado dentro de las 100 personas más influyentes del siglo XX según la revista Times, Dylan ha sido el autor de cientos de temas que han marcado a innumerables artistas en su carrera y que le han llevado a ser uno de los músicos que posee mayor cantidad de covers en vida.

Dada la categoría de uno de los mentores más relevantes en géneros que distan mucho de los que él mismo ha surcado, Bob Dylan surge como un símbolo difícil de disipar y al cual se le da débito para muchas de las asignaturas musicales que hoy se escuchan. El recabar la totalidad de los tributos que se le han realizado sería una tarea en sumo dificultosa, así como la de mencionar todos los intérpretes y bandas que han querido dar su culto al artista. Por lo mismo, he querido rescatar 10 de los covers más significativos que se han realizado en la historia del Rock y que dan cuenta, una vez más, del copioso crédito de Dylan y su música.

Para una mayor indagación recomiendo la página
http://dylancoveralbums.com/, donde se encuentra un amplio database por orden alfabético de los temas de Dylan interpretados por otros grupos.

El orden de la lista no atiende necesariamente a una jerarquía de mayor a menor calidad o importancia. Al final de ésta anexo un link de descarga con la totalidad de las canciones.

1. Jimi Hendrix - All Along The Watchtower (1968).

2. Pearl Jam - Masters Of War (1992).

3. Johnny Cash and June Carter - It Ain't Me Babe (1965).




Johnny Cash & June Carter - It Ain't Me Babe.


4. Guns N' Roses - Knockin' On Heaven's Door (1991).

5. The Rolling Stones - Like A Rolling Stone (1995).




The Rolling Stones - Like A Rolling Stone Video Clip.


6. The Byrds - My Back Pages (1967).

7. Rage Against The Machine - Maggie's Farm (2000).

8. George Harrison - If Not For You (1970).



George Harrison - If Not For You 1972.

9. Beck - Leopard-Skin Pill-Box Hat (2008).

10. Neil Young - Just Like Tom Thumb's Blues (1992).



Link descarga + bonus track The White Stripes - One More Cup Of Coffee (Dylan's cover): http://rapidshare.com/files/250919213/Covers_Bob_Dylan.rar.html


29 jun 2009

La voz discordante; Las facetas y el estilo del no-estilo de Mike Patton.


Designar a Mike Patton como un cantante más es cosa viciada. Su existencia musical ha traspasado las barreras necesarias para posarlo como un personaje único dentro de un área que no posee límites definidos y que hasta hoy se mantiene barriendo esquemas. Multifacético por antonomasia, Patton ha marcado un ícono dentro de aspectos tan divergentes como específicos. Su particular personalidad se ha transfigurado a obras que manejan una calidad tan extraña como funcional, y su versatilidad como intérprete ha arraigado seguidores que, por muy poco que comprendan las fronteras de su dominio en la música, saben a ciencia cierta que no existe atisbo alguno de detenerse en su labor arquitectónica de composición extravagantemente sincera.

Con apenas 17 años su capacidad en la voz no dio pie para contenerse en el silencio y fundó, con un extraño paralelismo entre lo absurdo y lo acabado, la banda de culto conocida como Mr. Bungle. Con una fusión a ratos desconcertante entre sonidos tan diversos como el Heavy Metal y el Jazz, Mr. Bungle fue aliado necesario para que Patton pudiera sentar confianza en la interpretación vocal que él requería oportuna. El pack que ofrecía incluía desde gritos expandidos hasta tonos sostenidos, con una profundidad gutural que haría examinar nuevamente lo que el Rock Alternativo significaba. Cortes inesperados arrinconados del poder incondicional del Metal eran acompañados de esquemas casi circenses, con una cuota de Ska notoria y con un Swing demasiado ajeno pero a la vez cercano con el concepto Bungle. Es en este período, comprendido entre 1985 y 1989, donde Mike Patton dedica sus esfuerzos a implementar un sonido propio y exento de un solo estilo. Ya entrados los noventa, el atípico vocalista se encontraría en comunión con una nueva agrupación que vio en él la voz necesaria para soportar los decibeles que darían existencia a una de las bandas más simbólicas de la década: Faith No More.



Faith No More - Midlife Crisis Live.

Fundado en 1981, Faith No More no contó desde un principio con Patton como el encargado de vocalizar al grupo. En efecto, el californiano vino a reemplazar al ya decaído Chuck Mosely, quien simplemente no podía seguir el hilo interpretativo buscado por el resto de los integrantes. Es así como en 1989 adquiere el protagonismo y penetra con soltura a las filas de Faith para convertirse en el encargado de hacer expandir la banda hacia latitudes donde la atención del público fuera innegable, gestionando letras que luego se convertirían en éxitos alrededor de todo Estados Unidos y el globo. Para este punto, Patton había “regularizado” su glosa para enmarcarla en canciones que no tuvieran tanta rareza, asumiendo que la agrupación tenía que internarse en los caminos del Hard Rock sin la ayuda de un ruido afinadamente exagerado. Empero, su intensidad no guardaría reposo pues, desde un principio, el poder seguir empleando tiempo en Mr. Bungle había sido expuesto con transparencia al ingresar a Faith No More.

Así, en un constante ir y venir entre la libertad aparente de Mr. Bungle, repleta de alaridos y fustigante sonido, y Faith No More, con un aire un tanto más comercial y con composiciones más entendibles, Patton no pararía de ejercitar su única y potencial voz logrando nuevos tonos para los desafíos que el mismo se imponía. Por sentar un ejemplo, “I Started a Joke”, un cover de los Bee Gees lanzado como bonus track en el disco King for a Day… Fool for a Lifetime de Faith No More, evidenciaría el considerable talante del artista para interpretar canciones con una línea melódica más suave y armónica, con escalas y un falsete mucho más digeribles que los que acostumbraba a realizar. Mas su gran pasión por el Noise y la búsqueda de nuevas creaciones basadas en la discordia no pararían y, terminado el ciclo con Faith No More, erigiría un nuevo boceto musical conocido como Fantômas.

Fantômas, con Dave Lombardo de Slayer en batería, sería locuazmente voraz. El primer disco homónimo no contendría ninguna canción más allá de dos minutos y ninguna letra con sentido alguno. Nuevamente, el albedrío se haría latente y el desconcierto en las presentaciones en vivo un halo difícil de no percibir. Pero esto, como en todos sus proyectos, no le importunaría en lo absoluto. Seguiría adelante con Fantômas - con una presentación en el Montreux Jazz Festival - y en el 2001 no sentiría problemas para formar Tomahawk, un grupo de Metal curioso en todas sus formas. Con la mesa de mezcla como protagonista (mesa de mezcla que venía estando presente desde hace bastante tiempo, sobre todo con Fantômas), Patton rugiría de manera literal, tomando como punto de partida bases de Trip Hop que obligarían a sustentar un nuevo concepto de Rock Experimental.




Tomahawk - God Hates a Coward.

A esta altura, hablar de Mike Patton homologaba hablar de incansable tentativa. La gama de corrientes en las que había participado era absolutamente avasalladora. Luego, en los albores del 2006 concreta una nueva formación, Peeping Tom, mucho más anodina que las anteriores y con aires de Pop underground. Comparte escenarios con varios artistas de la escena del rap y saca a emisión video clips con mayor producción. Sin ocultar su fanatismo por la música italiana, da vida al año siguiente al proyecto Mondo Cane, rescatando un Jazz europeo muy circunscrito de mediados del siglo pasado, tocando con orquestas y presentando un poco más de formalidad.

En otras áreas, Mike Patton ha encontrado cabida en bandas sonoras y producciones de cine, siendo el autor de la música de un vertiginoso film llamado Crank (2006) y A Perfect Place (2008). Produjo a su vez los alaridos fatales de los contagiados de I Am a Legend (2007) y ayudó en la vocalización de video-juegos. Cooperó con Zu, banda italiana sumamente difícil de definir, mostrando nuevamente en conciertos que el grito también puede formar parte de la música. Act
ualmente y para el deleite de muchos, se ha reunido con la última formación de Faith No More y prepara un tour que busca revivir la otrora gran influencia del grupo norteamericano.

En suma, no hay conclusión aparente para la carrera de Patton. No hay cause por el cual enmarcarlo ni estilo que pueda acercársele. Lo irrefutable de su condición es la cualidad inherente de una voz preciada y para nada frágil, que le ha dado la oportunidad como a pocos de hacer lo que se le plazca con ella. Interesante y enigmático, Mike Patton es experimentación en su forma más natural. Anarquistamente musical, forma parte del salón histórico de aquellos que, conscientes de su talento, no se dejan llevar por la masificación y buscan, en primer término, realizar lo que ellos estimen conveniente, generando nuevos paradigmas en el continuo devenir de la música.

24 jun 2009

La importancia de llamarse James: La mítica presentación de Jimi Hendrix en Woodstock 69'.

Ya habían transcurridos tres días de uno de los festivales más importantes de la historia del Rock. La copiosa lluvia de la segunda jornada obligó a mover la presentación de James Marshall Hendrix (Jimi Hendrix) a la mañana de un cuarto día, cuando la masividad ya no era tanta como al inicio del encuentro. Los ánimos no eran los mismos y el público, cansado de los excesos y la psicodelia, había comenzado a abandonar la explanada de Bethel, quedando sólo los más aguerridos y aquellos que sentían la convicción de tener que permanecer hasta el final en el evento musical más significativo de sus vidas.

Cerca de las 9 de la mañana del día lunes 18 de Agosto de 1969, el ambiente era de por sí expectante. Encargado de cerrar el festival, Hendrix había arrimado un seguimiento especial a través de la música realizada con el power-trío The Jimi Hendrix Experience. Empero, al ser presentado con esta titulación, el artista corregiría con rapidez al speaker para dar a conocer el nuevo nombre de la agrupación: Gipsy Sun and Rainbows. La incursión de percusiones y segunda voz descompuso en un primer momento las expectativas puestas en la presentación; mas a medida que la actuación fue ganando confianza también ganaría la aprobación de los miles de presentes.

Vestido a la usanza Flower Power, Jimi entraría en contacto con su guitarra de una manera poco antes vista en conciertos anteriores, utilizando una distorsión de tanta finura que incluso los errores parecerían ser parte de la elocución. La batería de Mitch Mitchell, acompañada de congas y otros instrumentos de percusión, lograría acercarse a las ideas y notas que segundo a segundo emanaban de Hendrix, logrando un compuesto en sumo atractivo como proyecto.


Jimi Hendrix & Gipsy Sun and Rainbows en Woodstock 69' - Foxey Lady

Ahora bien, un definitivo puesto es el que debe de darse a la magistral y controversial interpretación del himno de los Estados Unidos, The Star-Spangled Banner, donde la creatividad y la potencia se supieron mezclar para dar como resultado una de las creaciones artísticas que marcarían de por vida al artista. Emulando sonidos de guerra utilizando sólo lo que ofrecía el juego con la guitarra, para muchos The Star-Spangled Banner fue la posibilidad clara de poder expresar ante el mundo y sobre todo ante los coetáneos que el sentimiento de paz que cubría a Woodstock también era compartido por el músico.

Traspasada la barrera de la adecuación, la audiencia se encontró satisfecha por lo que el guitarrista de Seattle había presentado. Luego de dos horas en el escenario (la presentación más extensa dada hasta entonces por Hendrix), la leyenda de James en Woodstock y las significaciones que tuvo tal presentación sentarían un marco insoluble dentro de los anales de la música.


22 jun 2009

Grunge Is Not Dead; La historia de un movimiento que hizo expresar a toda una generación.


Para principios de los noventa, el Grunge (llamado así por primera vez en 1981) ya había generado no sólo un acontecimiento artístico sino también social. Marcados por el paso de la década, una gran cantidad de jóvenes adoptaron el Grunge como modo de expresión frente a lo inestable y desvalido del panorama universal, repletando recintos en donde grupos como Mudhoney o Soundgarden marcarían con su música a toda una colectividad.

Como un derivado acabado del Punk pero con matices claros de Heavy Metal y Hard Rock, el Grunge comenzó a dar sus primeros pasos en la biográfía del Rock de manera sigilosa, radicado esencialmente a la escena musical de Seattle. El fenómeno vendría sentenciado por factores propios de la zona geográfica donde se presentaba; una música marcada por sonidos de disconformidad, propios de una urbe en muchos aspectos decadente. Si bien no todo el Grunge se desarrolló en Seattle, la gran mayoría de las agrupaciones emergentes eran habitantes vernáculos del otrora pueblo leñador, acuñando vestimentas que mezclaban la necesidad de combatir el frío y la necesidad de presentarse inadecuados ante el sistema. Volcados a bares y pubs, los pioneros del género vieron cómo, poco a poco, el interés externo comenzó a penetrar en sus vidas citadinas y en la música que se generaba de este concepto.


Alice in Chains


Mas el Grunge no arrimó desde el comienzo melodías complejas y composiciones decididamente más estructuradas. Al ser una rama distintiva del Punk, lo que se oía en un principio exigía una gran tolerancia a la distorsión, el canto agrio y a las guitarras repetitivas. Es en este terreno cuando el sello discográfico Sub Pop fue el encargado de rescatar toda esta seguidilla de apariciones espontáneas y encausarlas en una sola senda, senda que más tarde sería conocida mundialmente como el Grunge. Green River y Screaming Trees serían los elegidos, entre otros, para aparecer en las primeras compilaciones lanzadas para el conocimiento público. Lo que Sub Pop no imaginaba era que, entre sus abanderados más representativos, la fascinación por la música no tardaría en llegar.



Mudhoney - Here Como Sickness


Si bien Sub Pop fue uno de los primeros indicios de interés serio por la música Grunge, ésta no le debía por completo su auge hacia territorios más allá de Seattle. Fue la propia técnica y el talento de las agrupaciones lo que, más temprano que tarde, desviaría las miradas hacia el movimiento. Lo que en un principio parecía ser sólo un sustrato mínimo de tendencia musical se convirtió en un sólido regente a nivel casi global, atrapando el espíritu de la llamada Generación X, la cual se caracterizaba por emitir un temperamento intolerante frente a la recesión valórica, económica y social presente en su esfera de convivencia. Así, las letras de la mayoría de las canciones se encontraban cargadas de una sutil furia y un desarrollado perfil de apatía que muchas veces caía en consideraciones depresivas y augurios fatalistas. A pesar de esto, la fama del Grunge no perdería adeptos que, eventualmente, transformarían a las bandas ya importantes en modelos de tendencia mucho más reconocidos.

La música Grunge comenzó a situarse en un intermedio sensato entre las tendencias que le antecedían. Con una elocución única, los rasgueos incesantes pasaron a ser acordes más trascendentales y con un ritmo definido. La tonalidad viajaba constantemente entre bases de Rock Pesado y Rock Alternativo, potenciando propiedades intrínsecas de estilo. La batería tomó el peso del Metal pero sin caer en su completa y abrumadora potencia, mientras que el bajo sería marcado con una mezcla de precisión y soltura que darían resultados muy cercanos a lo que se esperaba proyectar; un sonido renegado a la oscuridad, la opresión y el desencanto. Agresivo y muchas veces en búsqueda de la eliminación completa de los vicios sociales modernos, la música Grunge no escatimó en ser dura en su interpretación, abrazando el HardCore y eligiendo caminos de libertad de creación, muchas de ellas fundamentadas en la carrera de artistas como Neil Young e incluso Led Zeppelin.



Days Of The New - Touch, Peel and Stand (Live in Seattle 1998).

Antes de cruzar los ochenta, los proyectos musicales eran relativamente masivos. Mientras algunos se encontraban estables y con un futuro próximo, otros desaparecerían para conformar nuevas y más fundidas bandas. Tal es el caso de Mother Love Bone, un constructo emanado de la disolución de Green River que mezclaría el Glam Rock con el Punk y que sería un abanderado importante de los inicios del Grunge. Luego, tras la muerte del vocalista Andrew Wood por sobredosis de heroína en 1989, Chris Cornell – la voz de Soundgarden – llamaría a Stone Gossard y Jeff Ament, ex-miembros de Mother Love Bone, a formar Temple Of The Dog, un grupo de culto que lanzaría sólo un disco en honor a la muerte de Andrew. En este escenario, Eddie Vedder se uniría a la banda y, tras esa relación, formaría Pearl Jam junto a Jeff y Stone.


Mother Love Bone


Es en este contexto de génesis donde el futuro del Grunge tomaría forma. Terminados los ochenta, el éxito relativo se volvió un éxito avasallador, conducido casi sin discusión por el lanzamiento de dos de los discos más valorados del género: el Ten de Pearl Jam y el Nevermind de Nirvana, puestos en el mercado en 1991. Nirvana, con una historia remontada a 1985, fue el empuje necesario que el Grunge necesitaría para sentar territorio en los primeros años de los noventa. Alcanzado el primer lugar en las listas de ventas de Billboard, el Nevermind captaría la atención de decenas de miles de jóvenes de aquel tiempo, y Smell Like Teen Spirit sería el tema que designaría todo el sentimiento Grunge que ya era palpable alrededor del globo. A su vez, Alice in Chains y Soundgarden compenetrarían en este suceso de progresión, no logrando el fervor intenso por Nirvana pero sí perpetrando, sin lugar a dudas, un sonido mucho más particular, desarrollado y compuesto que el de otros grupos contemporáneos.


Pero es quizá el aplauso exacerbado por la música lo que carcomería las intenciones de seguir adelante con el proceso de expansión. Al ser el Grunge una manifestación necesariamente anti-sistémica, el que fuera de tanto alcance y considerado una moda más caló profundo en los autores de la música, en sus consideraciones y su motivación. Muchos no se encontraban dispuestos ni menos capaces de acatar tanta atención, tal como sentenciaría Kurt Cobain en su momento: "Ojalá hubiera tomado clases sobre cómo ser una estrella de Rock. Me pude haber preparado para esto.” Sumado a esto, las opiniones foráneas no eran por completo favorables, tratando al Grunge y su espíritu como algo fútil e insano para las mentes juveniles. A pesar de todas estas consideraciones, el movimiento seguiría con relativa estabilidad hasta mediados de la década, donde eventos específicos terminarían severamente con su apogeo. La muerte de Kurt Cobain en 1994 es quizá el simbolismo más preciso de cómo se extinguía el género y de todo lo que podía rescatarse de él. Los años siguientes el Grunge se fragmentaría de manera insostenible junto a la aparición de su verdugo, el Post-Grunge, con sonidos más débiles y exento de todo el ánimo intransigente de su movimiento inspirador. Alice in Chains dejaría de tocar en vivo y Layne Staley, vocalista, perecería el año 2002 por su adicción a las drogas.


Como una de las últimas manifestaciones musicales coherentes de todos los tiempos y como progenitor de una fusión de estilos diversos, el Grunge fue capaz de adherir a toda una esfera social enmarcada en años precisos e ideas concretas. Con la fuerza necesaria para emerger bajo su misma tutela, el Grunge tuvo la cualidad notoria de alcanzar la luz del conocimiento colectivo bajo sus propios logros y sus propias composiciones. Irrumpió en el panorama artístico tal cual lo hacen los vientos de huracán; de manera rápida pero con consecuencias imborrables. Apareció para dejar su mensaje e irse a refugiar en la memoria de todos aquellos que tuvimos la oportunidad de escuchar su música cuando ésta era realizada. Sin preguntarle a nadie, dio pasos agigantados para conseguir un legado que aún se mantiene con vigor en la Historia del Rock.



Pearl Jam - Even Flow (Live in Seattle 1991).